Gracias, muchas gracias Purito
Hoy ha decidido poner punto final a su carrera uno de los grandes. Uno de esos ciclistas que solo salen muy de vez en cuando y que cuando se van dejan un vacío enorme en esta profesión de dar pedales.
17 años de profesional, 17 años en los que nos ha mantenido en vilo en muchas ocasiones, pegados al televisor, viendo al pequeño catalán haciendo las cosas más grandes. Podium en mundiales, Vuelta, Giro, Tour. Grandes clásicas ganadas, número uno en tres ocasiones ¿se puede pedir más? Si, se puede: el cariño de la gente, de la afición, de aquellos que crecimos admirando al ciclista pero aún mucho más a la persona, genio y figura en todo momento.
Desde el inicio de su carrera se vió un corredor diferente, que hacía cosas diferentes. Clásicomano, corredor de grandes vueltas, de vueltas de una semana, daba igual. Todo con un punch final al alcance de muy pocos.
Si tuviera que clasificarle, le metería en el grupo de esos grandes genios, como el Chava o Pantani. Muchísimo más centrado pero con la misma genialidad y una filosofía de vida diferente al resto, siempre una sonrisa, nunca un mal gesto, disfrutando al máximo de lo que le gusta, que es dar pedales.
Cuando acabe la temporada se irá y le echaremos de menos. De hecho ya hemos empezado a hacerlo, porque costará mucho tiempo que salga otro ciclista como él. Se baja de la bici que tiene alguna deuda pendiente con él, no haber ganado alguna de las tres grandes es una injusticia, no haber podido ser campeón del mundo es una deuda mayor.
Gracias genio, muchas gracias.
17 años de profesional, 17 años en los que nos ha mantenido en vilo en muchas ocasiones, pegados al televisor, viendo al pequeño catalán haciendo las cosas más grandes. Podium en mundiales, Vuelta, Giro, Tour. Grandes clásicas ganadas, número uno en tres ocasiones ¿se puede pedir más? Si, se puede: el cariño de la gente, de la afición, de aquellos que crecimos admirando al ciclista pero aún mucho más a la persona, genio y figura en todo momento.
Desde el inicio de su carrera se vió un corredor diferente, que hacía cosas diferentes. Clásicomano, corredor de grandes vueltas, de vueltas de una semana, daba igual. Todo con un punch final al alcance de muy pocos.
Si tuviera que clasificarle, le metería en el grupo de esos grandes genios, como el Chava o Pantani. Muchísimo más centrado pero con la misma genialidad y una filosofía de vida diferente al resto, siempre una sonrisa, nunca un mal gesto, disfrutando al máximo de lo que le gusta, que es dar pedales.
Cuando acabe la temporada se irá y le echaremos de menos. De hecho ya hemos empezado a hacerlo, porque costará mucho tiempo que salga otro ciclista como él. Se baja de la bici que tiene alguna deuda pendiente con él, no haber ganado alguna de las tres grandes es una injusticia, no haber podido ser campeón del mundo es una deuda mayor.
Gracias genio, muchas gracias.
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