¿Que está pasando con el TJ Sports - Lampre?
Parece que no puede haber un invierno tranquilo en la categoría mas alta del ciclismo mundial. Este año que estábamos alejados de problemas económicos de los equipos, desapariciones, e incluso existía el problema de que había 18 WorldTour y se decía que querían reducirlo a 17, con lo que sobraba uno.
Pues no, ahora resulta que el proyecto chino TJ Sports (antiguo Lampre) ha saltado todas las alarmas. Cuando el pasado 25 de noviembre, la UCI anunciaba la concesión de 17 licencias WorldTour, dejando esta en el aire, se especuló con que solo era un tema administrativo, que se resolvería en los próximos días (tenían hasta el día 15 de diciembre) y nadie se puso nervioso.
Sin embargo, unos días después se cancelaba la primera concentración del equipo, aplazándola para enero de 2017, lo que, eso si, ya disparó todas las señales de emergencia.
Han tenido que pasar unos cuantos días para que los rectores del equipo justifiquen estos problemas públicamente: con una enfermedad de la persona que tenía que gestionar la licencia, y amparándose en concentrarse en este tema para suspender después la concentración. Aunque ya todo el mundo tiene la mosca detrás de la oreja.
www.arueda.com
Los primeros los ciclistas y por extensión sus representantes. Recordemos que en la estructura hay figuras de la talla de Rui Costa, Darwin Atapuma, Ben Swift o Louis Mentjes. El caso del sudafricano es sangrante (su representante, el excilista Robert Hunter, ya ha dicho que esta preocupado por el tema y se especula con que acabará en Dimension Data o Bahrein), porque pidió salir este verano, ya que el manager del nuevo Bahrein - Merida, Brent Copeland, es el mismo que tenía Louis en Lampre el año pasado, y le ofreció irse a Bahrein por el doble del sueldo. Saronni no le dejó marchar y ahora puede quedarse sin equipo, ya que si mañana no les conceden la licencia, los contratos de los ciclistas no serán validos.
En el mejor de los casos, solo las estrellas del equipo van a poder salir a otros equipos a estas alturas, eso si, rebajando su sueldo ostensiblemente (ya que todos los equipos tienen ya las plantillas cerradas y los presupuestos ajustados) y el resto de los corredores lo tendrán muy difícil.
El equipo tiene 60 trabajadores, que pasarían de formar parte del primer equipo chino del World Tour a estar en la calle, que ya sería de por si grave, pero aún mas si tenemos en cuenta que la UCI tenia o tiene para este 2017 un ambicioso plan de extensión del circuito en china.
Pues no, ahora resulta que el proyecto chino TJ Sports (antiguo Lampre) ha saltado todas las alarmas. Cuando el pasado 25 de noviembre, la UCI anunciaba la concesión de 17 licencias WorldTour, dejando esta en el aire, se especuló con que solo era un tema administrativo, que se resolvería en los próximos días (tenían hasta el día 15 de diciembre) y nadie se puso nervioso.
Sin embargo, unos días después se cancelaba la primera concentración del equipo, aplazándola para enero de 2017, lo que, eso si, ya disparó todas las señales de emergencia.
Han tenido que pasar unos cuantos días para que los rectores del equipo justifiquen estos problemas públicamente: con una enfermedad de la persona que tenía que gestionar la licencia, y amparándose en concentrarse en este tema para suspender después la concentración. Aunque ya todo el mundo tiene la mosca detrás de la oreja.
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Los primeros los ciclistas y por extensión sus representantes. Recordemos que en la estructura hay figuras de la talla de Rui Costa, Darwin Atapuma, Ben Swift o Louis Mentjes. El caso del sudafricano es sangrante (su representante, el excilista Robert Hunter, ya ha dicho que esta preocupado por el tema y se especula con que acabará en Dimension Data o Bahrein), porque pidió salir este verano, ya que el manager del nuevo Bahrein - Merida, Brent Copeland, es el mismo que tenía Louis en Lampre el año pasado, y le ofreció irse a Bahrein por el doble del sueldo. Saronni no le dejó marchar y ahora puede quedarse sin equipo, ya que si mañana no les conceden la licencia, los contratos de los ciclistas no serán validos.
En el mejor de los casos, solo las estrellas del equipo van a poder salir a otros equipos a estas alturas, eso si, rebajando su sueldo ostensiblemente (ya que todos los equipos tienen ya las plantillas cerradas y los presupuestos ajustados) y el resto de los corredores lo tendrán muy difícil.
El equipo tiene 60 trabajadores, que pasarían de formar parte del primer equipo chino del World Tour a estar en la calle, que ya sería de por si grave, pero aún mas si tenemos en cuenta que la UCI tenia o tiene para este 2017 un ambicioso plan de extensión del circuito en china.
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